Nuestra solución

Hemos dejado a un lado los requisitos de un hospital de estilo occidental, integrando los objetivos de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas, y una ingeniería climática inteligente para desarrollar y diseñar un concepto de hospital modular.

La planta consta de módulos individuales que están alineados en una red, cada módulo puede funcionar de forma independiente o conectarse a otros módulos. El tratamiento del agua y los residuos se llevan a cabo en el mismo sitio, así como la generación de energía renovable, y una ventilación natural efectiva que se optimiza de acuerdo con las condiciones del lugar y del clima. Esto significa que el hospital sostenible se puede adaptar a una amplia variedad de condiciones ambientales - los desafíos del desierto, la selva tropical o el permafrost se pueden abordar de manera integral en nuestro diseño. En caso de necesidad, las instalaciones pueden funcionar independientemente de la infraestructura existente.

El hospital está construido con materiales de construcción innovadores; los paneles compuestos están hechos de materiales 100% reciclados y pueden ser prefabricados localmente en cualquier lugar. Siempre y cuando sea posible, los materiales y piezas relevantes de la construcción se conseguirán localmente, de modo que desde un principio el hospital pueda tener un impacto económico positivo en la comunidad. Tanto la producción como el montaje de los materiales permiten ganar tiempo, y junto con la estructura modular, se puede garantizar un funcionamiento mucho más rápido del hospital.

Acuerdos con los principales fabricantes de equipos médicos garantizan que el hospital sotenible pueda brindar un estándar moderno en la tecnología de atención médica.

Un elemento cental del hospital sostenible es el apoyo que se brinda una vez que el hospital ha comenzado a funcionar. Nuestro objetivo es un funcionamiento de bajo impacto, integrado en la comunidad local, y que preste atención, tanto a los altos estándares de higiene, como a la comodidad del paciente. Independientemente de la infraestructura local, la instalación puede funcionar con energía 100% renovalble, generada y almacenada en el sitio. El agua y los desechos también se reciclan y reutilizan en el mismo lugar. El resultado es un edificio autosuficiente y neutro en CO2. La instalación está planeada a prueba de movimientos sísmicos, y el diseño permite que el hospital continúe funcionando, incluso si hay daños en módulos individuales.

El hospital crea puestos de trabajo a nivel local, tanto en la construcción como en el funcionamiento de este; por lo que la capacitación y formación son uno de los objetivos claves del proyecto. La cooperación con los profesionales de salud locales y los líderes comunitarios durante todas las fases del desarrollo, es esencial para adaptar el hospital eficazmente a las normas culturales locales y para que la instslación pueda asumir diversas funciones: educación para la salud, distribución de vacunas y medicamentos, coordinación de la atención de emergencia, o para funcionar como un centro comunitario.